Los trabalenguas se han utilizado durante años como un método de aprendizaje didáctico, entretenido y muy eficaz a la hora de entrenar la expresión vocal y modulación. Desde la niñez somos ilustrados con algunos trabalenguas de menor a mayor dificultad, con el objetivo de desarrollar mejor comprensión lectora y articulación de la boca.
Estos se basan en combinaciones de palabras con pronunciación similar para estimular la correcta modulación de la boca al hablar.
Trabalenguas hay miles, cada contexto histórico y generación cuenta con una serie de trabalenguas que esconden leyendas populares o simples divertimentos.
Independientemente de que seas más de los trabalenguas fáciles o difíciles, con una repetición diaria y constancia a la hora de tomar el libro de trabalenguas, poco a poco podrás pronunciarlos con más facilidad y claridad.
Aquí te recomiendo los 5 mejores trabalenguas para que desarrolles mayor agilidad en tu expresión vocal y adquieras un vocabulario más nutrido. Incluso, estos trabalenguas puedes enseñarlos a tus hijos, ya que la infancia es la mejor etapa para introducir la lectura de los trabalenguas.
Contenido del post
1. Me han dicho
“Me han dicho que he dicho un dicho
y ese dicho no lo he dicho yo.
Porque si lo hubiera dicho,
estaría muy bien dicho por haberlo dicho yo.”
2. Yo compro poco coco
“Yo compro poco coco,
porque como poco coco como,
poco coco compro.”
3. Mariana Magaña
“Mariana Magaña desenmarañará mañana
la maraña que enmarañará
Marina Mañana.
¿Desenmarañará mañana Mariana Magaña la enmarañada maraña
que enmarañó Marina Mañana?
4. Tres tristes tigres
“Tres tristes tigres comen trigo en un trigal.
Tanto trigo tragan
que los tres tigres tragones
con el trigo se atragantan.”
5. Había una madre godable
“Había una madre godable,
pericotable y tantarantable
que tenía un hijo godijo,
pericotijo y tantarantijo.
Un día la madre godable,
pericotable y tantarantable
le dijo a su hijo godijo,
pericotijo y tantarantijo:
Hijo godijo, pericotijo y tantarantijo,
tráeme la liebre godiebre,
pericotiebre y tantarantiebre
del monte godonte,
pericotonte y tantarantonte.
Así el hijo godijo, pericotijo
y tantarantijo
fue al monte godonte,
pericotonte y tantarantonte,
a traer la liebre godiebre,
pericotiebre y tantarantiebre.”
¿Con qué frecuencia debo practicar los trabalenguas?
Todos los días y repetidas veces. Lo más recomendable es que leas a una velocidad gradual, empezando con una articulación lenta y pronunciando detalladamente cada palabra. Poco a poco puedes ir aumentando la velocidad, por lo que será muy normal que te enredes e incluso, te frustres.
Lee con calma un trabalenguas hasta que puedas pronunciarlo a una velocidad rápida sin trabarte, claro, no te olvides de pronunciar bien cada palabra y que la lectura se entienda.
Beneficios de la lectura de los trabalenguas
Más que una forma de divertirse sin el uso de la tecnología, los trabalenguas brindan diversos beneficios a nivel intelectual, sobre todo, en el desarrollo de la memoria y la dicción.
Incitan a la superación y a la constancia al representar un reto para el lector, debido a su dificultad, aumentan las ganas de querer pronunciar correcta y fluidamente.